Para los que llegan desde Europa o Estados Unidos, Salvador de Bahía suele ser o bien la primera parada o parte importante de un primer itinerario por Brasil. Para los que llegan del sur en cambio, las primeras vacaciones en Brasil son casi siempre en las playas de Santa Catarina, luego si se puede se viaja a Río de Janeiro, y Bahía llega al tercer o cuarto viaje, casi como un pos-grado viajero.
Iglesia de São Francisco en el Pelourinho
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Ese pos-grado que es Salvador como destino brasileño, con sus contrastes y su diversidad incomparable, nos valida como viajeros a Brasil: lleguemos desde el norte o desde el sur, nos da el acceso a la esencia misma de lo brasileño, y a la verdadera fuente de gran parte de lo que desde el exterior conocemos como cultura Brasileña.
Ciudad Alta y Baja desde la Bahía
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Estuve en Salvador por primera vez en el verano de 1994, y por última vez en 2008; año en que viví en la ciudad varios meses, incluido un mes completo en el fascinante Pelourinho. En esos 14 años entre el primer viaje y el último, Salvador no ha cambiado demasiado en su esencia: sus shoppings y sus edificios han crecido, el Pelourinho ha repintado sus fachadas con diversidad de colores más planificada, y hay cada vez más turistas de todo el mundo visitando la ciudad: durante prácticamente todo el año es temporada alta en Salvador, y en Carnaval es casi imposible encontrar alojamiento si no se reserva con meses de anticipación.
Piscinas naturales en playa de Barra
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Salvador todavía es una de las ciudades más musicales del mundo. La diversidad de opciones es increíble: el reggae sigue tan popular como en Jamaica, el Axé se mantiene como la opción preferida de los establecimientos para atraer turistas, las periferias adoran una versión de baja calidad del forró llamada "arrocha", los grupos de percusión africanista retumban en los martes del Pelourinho, y también sobran los lugares donde escuchar interesantísimas bandas emergentes del rock bahiano, forró de calidad, buen MPB, Bossa Nova y Jazz, y todas las fusiones entre estilos imaginables.
Iglesia del Sagrado Sacramento en el Pelourinho
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Sus pequeños bares (llamados botecos en Brasil) siguen siendo insuperables, los hay de todo tipo desparramados por toda la ciudad, cada uno con sus historias y sus platos típicos. Salvador tiene el mar presente en todos lados, y playas urbanas míticas como Itapuã; tiene un atardecer hermoso sobre el mar de la bahía entre Farol da Barra y el fuerte de Santa Marta, justo en el límite con la playa de Porto da Barra, con su mar cristalino y sus piscinas naturales en plena ciudad . Bahía tiene favelas "chic", que surgen idílicas desde la distancia, ubicadas a orillas del mar por encima de las rocas y donde pasan estadías viajeros aventurados; y tiene restaurantes y bares con terrazas suspendidas justo en el borde entre la ciudad alta y la baja, con vistas espectaculares de la inmensa bahía de todos los santos.
Vista aérea Faro y playa de Barra
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Todo hace de esta ciudad un lugar difícil de sustituir con otros, hay sitios parecidos a Salvador en otras partes de Brasil, pero Salvador seguirá siendo única e insustituible como uno de los destinos brasileños por excelencia.
Jazz en el Museo de Arte Moderno de Salvador de Bahía
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Tampoco está de más decir que hay lugares comunes de un viaje a Salvador de Bahía que no pueden ser salteados ni siquiera por los viajeros más rebeldes: hay que ir al Pelourinho obviamente, hay que meterse con alma de explorador entre los recovecos de sus iglesias centenarias y presenciar sus fiestas; hay que comer un acarajé en Río Vermelho o en Itapuã para conocer el sabor más básico de su gastronomía; hay que subir y bajar con el elevador Lacerda entre el mercado modelo y la ciudad alta al menos una vez; y si estamos durante el 2 de febrero en la ciudad, hay que ir sí o sí a ver la fiesta de Yemanjá en Rio Vermelho; porque si no, nos volveremos de Salvador con una sensación extraña en el estomago, un cosquilleo parecido a la culpa.
Una favela "chic" vista desde el Museo de Arte Moderno
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Aun conociendo bastante Salvador, habiendo sido turista en la ciudad las primeras veces, luego habiendo sido huésped de amigos bahianos que me pasearon por los lugares que sólo quien vive allí conoce, y al final viviendo varios meses yo mismo en la ciudad; considero a Salvador de Bahía un lugar de una riqueza prácticamente inabarcable, y creo que no hay guía que la pueda expresar mejor que conocerla personalmente. Todavía me quedan lugares pendientes para próximos viajes o estadías, como el reconcavo bahiano, esa parte profunda de la bahía de todos los Santos que es el principio del interior bahiano; quisiera conocer Santo Amaro sobre todo, la ciudad natal de Caetano Veloso y ese bar donde él escuchó por primera vez el estreno de Chega de Saudade cantado por João Gilberto, el día en que nació la bossa nova y la música popular del mundo cambió para siempre.
Bahiana en fiesta de Yemanjá de Río Vermelho (Salvador de Bahía)
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comentarios
Todo es bellisimo en Brasil, sus lugares; su música, su gente, sus playas. sus comidas.etc.etc.etc, Por qué no premiarnos con algo a quienes hacemos de Brasil nuestra casa en todas nuestras vacaciones?, no sé un recuerdo, una cena, una visita guiada, algo como para sentir que les importamos y quieren q regresemos, igual está todo perfecto y el 20 de enero nos vemos otra vez.
Adriana y Ricardo
Mi primer viaje a Brasil fue por 1995 a Florianópolis. Luego de estar allí me preguntaba por qué no había ido antes!! Fui muchas veces a Floripa y conocí varias playas. Como decís, tenía que seguir conociendo y el próximo viaje fue a Río de Janeiro, increíble!!! Lo que más me impactó fue ver cómo la ciudad se metía entre los morros!! Me queda pendiente desfilar en el Sambódromo que aún lo tengo en el debe.
Finalmente llegó el pos-grado y visité Bahía. Fue amor a primera vista. Me pasó algo curioso, me sentía como en casa y me dolía en el alma cuando tenía que regresar!!! Fui dos veces más y la tercera seguí para Maceió y Recife.
La verdad que soy una fanática de todo lo relacionado con Brasil, su gente, su música, sus paisajes, sus comidas, ahh el acarajé con batapá del Pelourinho.
Mi último viaje fue en 2005 y já estou com muita saudade!!!
Hola Mariel, gracias por tu comentario y por todo lo que nos contás de tu amor por Brasil, espero que puedas viajar pronto a Brasil y se termine la saudade... Saludos y buenos viajes!
Muchas gracias Paula!! Saludos y buenos viajes!
Hola Brasil Playas, solo es para saludarlos y reconocerles lo excelente y útil que es la información que dan en el sitio. No encontré nada parecido que brinde tantas cosas importantes juntas a la hora de armar un viaje a Brasil.
Muchas gracias!
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